Doctor: Hola Mara. Antes de que entraras y revisando tu expediente me he dado cuenta de que llevas casi tres años sin venir. No vendrás a que te ponga a régimen porque… ¡estás realmente guapa!
Mara: Jose. ¡No sabía que te habías convertido en un seductor! Cuando venía con…, Gustavo nunca imaginé que pudieras flirtear tan directamente.
Doctor: ¡Ah! ¡Gustavo! ¡Cierto! es que esta vez no vienes con él.
Mara: No.
Doctor: mMmm. ¿Acaso ya no estás con él? ¿No tuvisteis el…?
Mara: ¡NO!!!! En realidad…., bueno…, todo eso ya pasó. Está olvidado… Estoy aquí por otra cosa…
Doctor: Bien, pero no puedo resignarme a decirte lo que pensé sobre ese tipo el día que vinisteis juntos… Era músico, ¿verdad?
Mara: ¿Cómo?
Doctor: Solo contéstame una cosa.
Mara: ¿Qué?
Doctor: ¿Era cariñoso contigo?
Mara: ¿Perdona?
Doctor: Dime si era cariñoso contigo.
Mara: No es muy educado por tu…
Doctor: Quizás no lo es pero…, Mara. No lo era. En realidad, era una relación desigual y con las cartas buenas al revés… Una chica tan completa con un barbudo viejo, igual de enclenque que gordo… Las dos veces que vinisteis pude sentir, una vez más, cómo la injusticia conquista el pequeño mundo este absurdo. ¿A santo de qué convertías A SABIENDAS, el poder de tu alegría contagiosa en un trapo a merced de una nariz sucia, vacía e inmoral, y que sabe de antemano que nunca va a adelgazar…? Mara. ¿Por qué lo consientes?
Ese tipo…
Mara: Jose, ¿con qué…
Doctor: ¡Espera un momento!
Mara: Jose. Aquí no he venido nada más que por mis problemas de siempre. Han vuelto. Me duele el cuello. Mucho. No me deja respirar y apenas puedo nadar.
Doctor: Mara. ¿Has visto tu cara? Pareces más joven y
Continuará…
Mara Blixen.
(Tardes suaves de verano. Veremos la continuación, aunque yo ya la he leído..)
Deja una respuesta