Cómo echarte de menos con cursilería…

MARACARTAS DE AMOR 1:

Mi amor, cuatro días han pasado desde la despedida en la fría Gran Vía,

Pero tu calor sigue envolviendo mi solitaria piel,

Aunque sea solo en los húmedos sueños que padezco.

¡Oh! Con ello tengo que conformar mi desdicha porque no existes  ahora.

 

Te perdono que no estés para hacerme sonreír,

Porque mi negra doblez me invita a disfrutar tu ausencia,

porque puedo saborear con mayor ímpetu la pasión de tus besos,

porque no debo asirme a nada.

 

Pero ¡oh, mi amor! ¿Qué puedo hacer cuando mi cuerpo anhela tu sangre?

Encuentro refugio en la escritura, sí, pero

¿Qué pasará cuando mis mundos ilimitados busquen expandirse si no puedo tocarte?

Me ahogaré en mi atormentado ego recordando la maestría y delicadeza con que absorbías, en nuestro último encuentro,  los finos paramentos de mi cueva.

Intentaré que no se desdibuje nuestra unión carnal engarzándola  fuertemente con mi memoria.

Pero, amado y cómplice mío, tengo que confiarte algo que me causa rubor.

No podré nunca explotar ya que ni la soldadura  más tenaz es suficiente en mi despoblada soledad.

MAra Blixen.

Blog de WordPress.com.

Subir ↑